Nota del Teléfono de la Esperanza con motivo de la Declaración de Luto Oficial

El Teléfono de la Esperanza se une al luto oficial al que ha convocado el Gobierno de España para expresar el dolor de toda la sociedad por las víctimas de la pandemia provocada por el Covid- 19.
Mas allá de las frías estadísticas, queremos trasmitir nuestras condolencias y expresar nuestra solidaridad con todas y cada una de las familias que han perdido alguno de sus miembros de los que, por circunstancias sobadamente conocidas, no han tenido ni siquiera la posibilidad de despedirse.
Queremos manifestar un especial reconocimiento a nuestros mayores, principales víctimas del coronavirus. Hombres y mujeres a los que les tocó vivir tiempos difíciles, que trabajaron duramente para alcanzar un nivel de vida digno, se comprometieron, desde un espíritu de reconciliación, con la libertad y la democracia y, en momentos de especiales dificultades, se convirtieron en el apoyo fundamental de sus familias. Nos duele especialmente las penosas circunstancias en que se han enfrentado a su último destino y hacemos votos para que nadie sea discriminado en su acceso a los recursos sanitarios por razones de edad.
Ojalá la dura experiencia vivida nos ayude a todos a avanzar por el camino de la solidaridad hacia los colectivos más vulnerables, entre ellos los ancianos, merecedores de nuestro sincero reconocimiento, de pensiones dignas y de atenciones que les permitan afrontar el último trayecto de su vida sabiéndose respetados y queridos.
En la medida de nuestras posibilidades, queremos ofrecer de forma gratuita el servicio de nuestros especialistas en salud mental a todas las familias que han perdido un ser querido. Ponemos nuestros recursos a disposición de todas aquellas personas que, dados los penosos acontecimientos vividos, estén atravesando por un proceso de duelo difícil que pudiera hacerles perder su equilibrio emocional. El Teléfono de la Esperanza se siente incondicionalmente al lado de todas ellas.
Descansen en paz todos los fallecidos como consecuencia de la terrible pandemia del Covid-19.
Sit tibi terra levis.

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